Mark González y Baiano tuvieron el desempate en sus botas

EMPATE A NADA EN LA NUEVA CONDOMINA

El Murcia y el Betis ofrecieron en un partido espeso y falto de ritmo que terminó en tablas y sin goles en ninguna de las dos porterías. El Murcia lo intentó más y llevó el control del juego casi todo el tiempo, pero sin demasiada profundidad. El Betis, por su parte, salió a especular, cerrando huecos atrás y esperando la oportunidad a la contra. Baiano, en la primera parte, y Mark González, en la segunda, tuvieron en sus botas en más de una ocasión, las pocas opciones de desequilibrar el choque.

En la primera parte, el Murcia salió más enchufado al partido y avisó en dos ocasiones casi consecutivas que pasaron por las botas del ex sevillista Gallardo en los primeros cinco minutos. Poco después, fue Pablo García –la gran reaparición de la jornada- el que trenzó y finalizó la mejor jugada individual de todo el partido. Acto seguido, Sobis, rematando desde fuera del área, dio la respuesta verdiblanca.

El Betis disfrutó de otra ocasión a renglón seguido. Fue Caffa, lanzando magistralmente una falta que estrelló en el larguero. Pero la cosa no quedó ahí. La estrella del Murcia, Baiano, se guardaba dos ‘ases’ en la manga antes de irse a la caseta. El delantero grana estuvo apunto de adelantar a los suyos mandando dos remates muy peligrosos a la portería de Ricardo, el segundo de ellos, al palo.

Tras la reanudación, Cúper sentó a Rivas, con una amarilla, y sacó a Melli. El ritmo del juego fue aún menor que el vivido a lo largo de la primera mitad, sin embargo, al igual que antes, Baiano fue el hombre que acercó el peligro al área heliopolitana.

Así, en el minuto 52, el delantero brasileño se sacó un disparo increíble que no entró por poco, de la misma forma que tampoco lo hizo el de Movilla, el otro veterano del Murcia, desde fuera del área.

Se notó al chileno
En el ecuador de esta segunda mitad, Héctor Cúper decidió sacar a Mark González y sentar a Xisco. El cambio pudo ser decisivo, ya que de las botas del chileno salieron las mejores ocasiones del Betis.

Minutos después, Alcaraz revolucionó su ataque dando entrada a Regueiro y Goitom, sin que ninguno modificara lo más mínimo la situación.